domingo, 17 de junio de 2012

Qué cosas tan absurdas y poco coherentes suceden a veces, pero de ahí se sacan las conclusiones finales.





¿error? no, precisamente no creo que sea eso. Las viejas siempre dicen: de los errores se aprende, pero por eso mismo si tan error fuese no existiría la moraleja. Qué sería la caperucita roja sin el lobo? Y la blancanieves sin la manzana? Que sería el verano sin el invierno? Y la primavera? Para qué existirían los buenos momentos? Y las reconciliaciones? Para qué te levantarías por las mañanas, esos días que has de madrugar? Que sería de todo aquello que pasó?
Te sientes como en una habitación encerrada, sin color, las paredes (muy pequeñas) te rodean y no hay puerta de salida, ni ventana, no hay sol, ni lluvia, a penas queda oxígeno y te sientes sola. Pero esto son imaginaciones, solo eso, pesadillas. Horribles pesadillas.

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